Seleccionar página

Me gustaría comenzar mi aventura en este blog haciendo una reflexión sobre las nuevas tecnologías emergentes que inundan el mercado IT, la prensa especializada (y no especializada), los eventos y la jerga tecnológica.  Posteriormente en próximas publicaciones, las analizaremos en profundidad e indagaremos sobre que efectos tienen o tendrán en nuestra sociedad, y como nos tendremos que adaptar a un desarrollo tecnológico exponencial con una velocidad y aceleración mucho más rápida que la velocidad promedio a la que la mayoría de las personas pueden asimilar todos esos cambios.

El Internet de las cosas (IoT) va a revolucionar el modo en que recopilamos datos con sensores cada vez más inteligentes y mejor conectados. La tecnología 5G va a permitir unas velocidades de conexión y transmisión de datos jamás vistas hasta ahora. Big Data y la tecnología que hay detrás desde el punto de vista de cómputo, permite analizar en tiempo real cantidades ingentes de datos estructurados y no estructurados. La Inteligencia Artificial (AI), el aprendizaje de las máquinas (Machine Learning) y la Super Computación están desarrollándose a velocidades que no imaginamos.

Estas tecnologías por si solas son capaces de optimizar y mejorar procesos, y ya estamos viendo muchos proyectos en cada una de las áreas que permiten a las empresas recopilar más datos, ser más eficientes, ahorrar costes y tomar mejores decisiones. Pero es quizás, desde mi humilde punto de vista, la convergencia de todas las tecnologías la que nos llevará a un estado de automatización superior que afectará a todos, empresas, personas y la sociedad en general.

La combinación del Internet de las Cosas con la Inteligencia Artificial, Big Data y el resto de las tecnologías emergentes, es lo que va a crear soluciones (o máquinas) más eficientes a la hora de recopilar datos, gracias a la tecnología 5G, y permitir una mejor monitorización, análisis predictivo y mantenimiento de todos los ecosistemas.

Todas estas tecnologías se están retroalimentando para crear un ecosistema de automatización real. Los sensores IoT recogen millones de datos basándose en cada vez más numerosos criterios, que son enviados al Cloud (o Edge Cloud) y usados para entrenar algoritmos de Inteligencia Artificial. Entender como todas estas tecnologías interactúan y se benefician unas de otras es lo mejor que podemos hacer para traer beneficios a nuestras empresas, nuestras vidas y nuestra sociedad.

¿Serán capaces los órganos reguladores del gobierno y la educación de adaptarse a la velocidad del desarrollo tecnológico? Encantado de conocer vuestras opiniones.

Oscar Jimenez

CEO Humalia Solutions S.L.